Epístola de Primera de Pedro XI
Fred R. Coulter—1 mayo, 1993
Vamos a cubrir esencialmente la última parte de 1 Pedro capitulo tres. Así que volvamos y repasemos un poco; vayamos a 1 Pedro 3:12 para repasar sólo esta Escritura porque es muy importante. Yo creo que es importante que repasemos esta serie para que no entremos en una rutina de lo que predico; es decir, que no entremos en una rutina de lo que se enseña habitualmente. Es importante que metamos nuestras narices en la Biblia, y como he dicho antes, esta traducción no fue diseñada como un reemplazo de la Palabra de Dios, sino como una guía de estudio con un margen ancho para ayudarle a estudiar.
1 Pedro 3:12: “Porque los ojos del Señor están sobre los justos, y Sus oídos están abiertos a sus súplicas…” Y eso es algo que debemos entender, y saber que:
· Dios está ahí para escuchar
· Dios está ahí para ayudar
· Dios cuida de nosotros
Como dijo Jesús: El Padre no va a perder a ninguno. Yo veo eso muy claramente. Dios puede dejarnos vagar por un tiempo; Él puede permitir que nos desviemos por un tiempo, pero Dios no va a darse por vencido con nosotros. Dios tiene un plan tremendo para que todos nosotros estemos en Su reino, y Él no se va a rendir por ningún motivo.
“…Pero el rostro del Señor está en contra de quienes practican maldad” (verso 12). ¿Ven cómo funciona? ¿Ven cómo esto lo deja claro? Muchas veces las personas piensan que Dios no va a tomar en cuenta lo que hagan los malvados, ¡Pero sí lo va a tomar en cuenta!
Volvamos al libro de Eclesiastés capitulo ocho. Aquí hay dos cosas a considerar respecto a Dios cuando hablamos de personas que hacen el mal. A veces el castigo es inmediato, pero a veces no. Dios no se complace en la muerte del malvado, pero sí quiere saber qué es lo que hay en el corazón. Entonces, cuando vemos todas las cosas que están sucediendo, debemos tener todo eso en mente al mirar a nuestro alrededor. Aquí hay una verdad absoluta:
Eclesiastés 8:11: “Por cuanto la sentencia contra una mala obra no es ejecutada rápidamente… [Porque las personas creen que se salen con la suya]…por lo tanto, el corazón de los hijos de los hombres está totalmente dispuesto en ellos para hacer el mal.” Si usted conecta todas estas cosas, se va a dar cuenta de que tarde o temprano ellos van a tener que enfrentarse a las consecuencias de sus actos. ¡Dios lo sabe! Dios conoce a aquellos que practican la maldad, pero espera que los malvados se arrepientan. Después de todo, ese es el propósito— ¿No es así? Conecte esto con la parábola del hijo prodigo.
Ahora, aunque a nosotros (que somos pecadores) nos gusta aferrarnos a la parte donde volvemos a Dios y Él está ahí para ayudarnos… también está el otro lado de la historia. El otro hijo pudo haber estado igual de feliz de que su hermano se arrepintiera; pero en vez de eso se enojó, y le dijo a su padre: ‘Oye yo he estado aquí todo el tiempo haciendo esto, y tú nunca has hecho un banquete para mí.’ Y el padre le dice, ‘Hijo, tu siempre estás conmigo.’ Es decir, que este acto no perjudicaba la herencia del otro hermano. A veces nosotros nos ponemos así con personas del mundo, cuando vemos todo lo malo que está sucediendo; adoptamos una indignación auto-justa. A veces nos preguntamos ¿Cómo es posible? Bueno, Dios sabe por qué y Él se va a encargarse de eso. Tal vez lleguen a un punto tan miserable es sus vidas por causa de las cosas que hacen, que eso los lleve a arrepentirse ante Dios. Esperemos que ese sea el caso.
Entonces, hoy vamos a cubrir 1 Pedro 3:13-18: “Y ¿hay alguno quien les hará daño si ustedes son seguidores de aquello que es bueno? Ahora, por otro lado, si ustedes padecen sufrimiento por el bien de la justicia, ustedes son benditos… [Aunque muchas veces no se sienta así cuando pasemos por eso]… Pero no deben estar temerosos de su terror, y no deben dejarse intimidar… [Esa es una palabra muy interesante en el griego]…Pero santifiquen al Señor Dios en sus propios corazones, y siempre estén preparados a dar una respuesta a cualquiera que les pregunte la razón para la esperanza que está en ustedes, con mansedumbre y reverencia; teniendo una buena conciencia de que, mientras que ellos puedan hablar contra ustedes como malhechores, aquellos quienes estén denostando su buena forma de vida en Cristo puedan ser avergonzados. Porque es mejor, si esa es la voluntad de Dios, que ustedes sufran mientras hacen el bien que sufrir por hacer el mal; porque Cristo en verdad sufrió una vez por los pecados, el Justo por el injusto, para que Él pudiera traernos a Dios; por un lado, Él fue condenado a muerte en la carne; pero por otro lado, Él fue vivificado por el Espíritu.”
Veamos algunas otras Escrituras que conectan con eso. El Salmo 56 es un Salmo tremendo— y si usted llega a sentir que sus oraciones se vuelven repetitivas, o las cosas se vuelven complicadas para usted—vaya a los Salmos y úselos en sus oraciones (para empezar sus oraciones). Eso será de gran ayuda para usted. Aquí hay una oración tremenda que creo que tiene mucho que ver con el ministerio mismo de Cristo, y con las cosas por las que Él tuvo que pasar.
Muchas veces hemos oído la opinión de que esto fue bastante fácil para Jesús. Pero si usted lee Hebreos 5, verá que Él tuvo que clamar fuertemente con oraciones a Aquel Quien era capaz de salvarlo de la muerte. Aunque Él era un hijo, Él aprendió la obediencia por las cosas que sufrió. Piénsenlo de esta manera: Jesús—Quien era perfecto—debe haber sufrido todos los días por las cosas que Él veía.
Piensen en Cristo cuando leamos este Salmo 56:1: “Se graciable a mí, Oh Dios, pues el hombre me tragaría; combatiéndome todo el día, el me oprime… [Y yo no conozco a nadie que haya pasado por esto de la misma forma en que Cristo lo hizo]… Aquellos que me esperan al acecho me pisotearían, pues muchos son los que orgullosamente pelean contra mí. Cuando tengo miedo, yo confiaré en Ti. En Dios—alabaré Su Palabra— en Dios he puesto mi confianza; no temeré. ¿Qué puede hacerme la carne?” (versos 1-4).
Nosotros podemos conectar varias cosas con esto. Juan 6:63 dice que: ‘La carne en nada beneficia.’ Puede haber personas que le hagan cosas a usted, pero cada vez que eso pase, pregúntese: ¿Qué diferencia va a hacer eso a largo plazo? Estamos entrando en tiempos muy difíciles, y nosotros podemos verlo a nuestro alrededor. Cuando la sociedad en general no sigue los preceptos de la Palabra de Dios, siempre aparecen personas tratando de establecer su propia justicia—lo cual ocasiona más problemas como el de Waco.
Verso 5: “Todo el día ellos pervierten mis palabras… [Tuercen las palabras de Cristo]… todos sus pensamientos son de mal contra mí.” Vean la confrontación que tuvo Jesús justo antes de ser crucificado. Cuando Él vino al templo, los fariseos y los saduceos vinieron para tentarlo. Ellos querían matarlo, querían apedrearlo, querían arrestarlo, y siempre quisieron encontrarlo en algún tipo de maldad. Sus discípulos ni siquiera podían ir por el campo tomando algo de grano maduro para comer… sin que vinieran los Fariseos a decirle, ‘Tus discípulos están cosechando en el Sábado.’ Esas eran situaciones difíciles para Él.
Verso 6: “Suscitan contienda; se esconden ellos mismos; vigilan mis pasos mientras esperan por mi alma. Por causa de iniquidad échalos fuera… [¿Se van a salir con la suya a largo plazo?]… En Tu ira derriba al pueblo, Oh Dios. Tu numeras mis andanzas, Oh pon mis lágrimas en Tu botella; ¿no están ellas en Tu libro?” (Versos 6-8).
David fue quien escribió este Salmo. Así que éstos son algunos de los sufrimientos personales de David, al igual que profecías sobre Jesucristo. Obviamente esto no significa que debemos guardar nuestras lágrimas en una botella, para después mostrársela a Dios y decirle: ‘Señor, he sufrido.’ No significa eso. Esta es una metáfora de que Dios no deja que ninguna lágrima se le escape. ¡Él lo sabe! Él lo sabe.
Verso 9: “Cuando clame a Ti, entonces mis enemigos retrocederán. Esto lo sé porque Dios está a mi favor.” Y algo que usted debe de entender, es que:
· ¡Dios está por usted!
· ¡Dios lo ama!
· ¡Dios lo ha llamado!
¡Usted tiene un propósito tremendo!
Verso 10: “En Dios—alabaré Su Palabra; en el SEÑOR—alabaré Su Palabra. En Dios he puesto mi confianza; no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre? Tus votos están sobre mí, Oh Dios; te daré ofrendas de gratitud a Ti, porque has librado mi alma de la muerte. ¿No has guardado Tú mis pies de caer, para que pueda andar delante de Dios en la luz de los vivos?” (versos 10-13). ¡Ese es un Salmo tremendo!
Ahora, vayamos a Mateo capitulo diez para ver cómo aplica esto. Aquí hay una Escritura que nosotros conocemos, y que hemos repasado varias veces. Esto debería ayudarnos en todo lo que hacemos, porque muchas veces pensamos que sólo nosotros tenemos problemas en nuestras vidas. La realidad es que casi todos en el mundo tienen problemas en sus vidas, y es por eso que podemos tener plena confianza en el camino de Dios. Podemos tener plena confianza de que Dios sabe.
Mateo 10:28: “No tengan miedo de aquellos que matan el cuerpo, pero no tienen poder para destruir la vida; más bien, teman a Quien tiene el poder para destruir ambos la vida y el cuerpo en el Gehena… [Después Jesús agrega]:… ¿No son dos gorriones vendidos por una moneda? Y todavía ni uno de ellos caerá a la tierra sin su Padre teniéndolo en cuenta… [Esto es, sin que sea de Su conocimiento. ¡Así que Dios sabe!]…Pero incluso los cabellos de su cabeza están todos contados” (versos 28-30). En otras palabras, cuando la Biblia dice que los ojos del Señor están sobre el justo, no es para contar sus cabellos. Esto significa que Dios lo conoce tan bien, y que está tan profundamente involucrado en Su vida… que ¡Él conoce cada uno de nuestros pensamientos! Es por eso que podemos tener esa valentía de la que habla Pedro.
Vayamos a Isaías 50:7, porque ahí hay otra Escritura tremenda. Y déjenme decirles por experiencia personal, que tarde o temprano Dios lo va a poner a usted en una posición en la cual sólo Él pueda ser su ayuda. Una situación en la que usted sienta que no queda absolutamente nada en su vida, más que ponerse de rodillas ante Dios. Uno se siente bastante miserable cuando eso sucede. Yo así me sentí; yo me he sentido así—pero Dios no se siente miserable porque Él está ahí para ayudarlo. ¡Dios está ahí para ayudarlo!
Isaías 50:7: “Porque el Señor DIOS Me ayudará; por lo tanto no he estado en desgracia. A cuenta de esto he puesto Mi rostro como un pedernal…” No en necedad contra Dios, sino en la fuerza y en el poder del Espíritu de Dios; sabiendo que si Dios está por usted, nada puede estar en su contra. También pueden anotar Romanos 8 en su margen, para que estudien y añadan lo que dice ahí.
“…y sé que no seré avergonzado. Él, quien me justifica está cerca… [Dios siempre está ahí para ayudar]… ¿Quién contenderá conmigo? Parémonos juntos; ¿Quién es mi adversario? Dejen que se Me acerque” (versos 7-8).
He recibido críticas muy fuertes de aquellos que no están de acuerdo con el libro de la Pascua, y algunos hasta han dicho que soy un agente de Satanás el diablo, esparciendo mentiras a los hermanos. Pero yo sé que lo que escribí pasa la prueba ante la Palabra de Dios. No me voy a preocupar de lo que ellos hagan o digan. Jesús dijo que ‘si Ellos Me llaman—refiriéndose a Sí mismo—Belcebú, cuanto más van a llamar a aquellos de la casa.’ No hace ningún bien lanzar acusaciones, porque eso no va a resolver nada. Lo que va a resolver el problema es meter nuestras narices en la Palabra de Dios.
“…¿quién es él quien me condenará? He aquí, todos ellos envejecerán como una vestidura; la polilla los comerá. ¿Quién entre ustedes teme al SEÑOR? ¿Quién obedece la voz de Su siervo? ¿Quién anda en tinieblas y no tiene luz? Que confíe en el nombre del SEÑOR, y se apoye en su Dios. He aquí, todos ustedes quienes encienden un fuego, quienes se ciñen con teas; caminen en la luz de su fuego, y en las chispas que han encendido… [Esto es: apoyarse en sus propias obras, apoyarse en lo que usted está haciendo]… Esto tendrán de Mi mano—que se acostarán en dolor” (versos 8-11). Así que a la larga, ¡Dios lo va a cambiar para bien!
Isaías 51:1 continúa directamente con lo que estamos viendo; éstas son palabras de ánimo para nosotros: “Escúchenme, ustedes que siguen tras justicia, ustedes que buscan al SEÑOR: Miren a la roca de la cual fueron cortados… [Y ¿Quién es esa Roca? ¡Cristo! Y ¿No dijo Pedro que nosotros debemos ser piedras vivas cortadas de la Roca? ¡Sí, así es!]…y al hueco del pozo del cual fueron extraídos. Miren a Abraham su padre, y a Sara quien los dio a luz; porque Yo lo llamé sólo a él, y lo bendije, y lo hice muchos.’ Porque el SEÑOR confortará a Sión; Él confortará todos sus lugares desechos…” (Versos 1-3)—y después habla sobre la redención que vendrá cuando Cristo regrese. Por eso los Salmos son tremendos para nosotros.
Entonces, toda la lección de 1 Pedro 3:13 es que nadie puede hacerle daño si usted sigue a Dios. ¡Nadie puede, bajo ninguna circunstancia! No se desanime por eso. 1 Pedro 3:14: “Ahora, por otro lado, si ustedes padecen sufrimiento por el bien de la justicia, ustedes son benditos…” Así que existen bendiciones— aunque no se sienta como una bendición cuando pasamos por eso.
Tenemos todas las bendiciones que vienen en el libro de Mateo, las cuales cubriremos cuando hagamos el estudio correspondiente. Va a ser muy emocionante hermanos. Eso va a incrementar nuestra fe en lo que Dios ha hecho con el Nuevo Testamento; va a incrementar nuestra fe en todo lo que Cristo y los apóstoles han hecho.
Mateo 5:10: “Benditos son aquellos que han sido perseguidos por amor de la justicia, porque de ellos es el reino del cielo. Benditos son ustedes cuando los reprochen, y persigan, y falsamente digan cada cosa mala contra ustedes, por Mi amor. Regocíjense y estén llenos de gozo, porque grande es su recompensa en el cielo, porque de esta misma manera ellos persiguieron a los profetas que estaban delante de ustedes” (versos 10-12). Y aquí hay una lección tremenda para nosotros hermanos.
¿Por qué deberían pasarle a usted esas cosas? ¿Por qué Dios lo pondría a usted en una posición como ésta?
· Porque nosotros no somos del mundo
· Porque Dios nos ha llamado
· Porque Cristo sufrió antes que nosotros
Pero todos tenemos algo muy profundo que aprender.
Verso 43: “Ustedes han escuchado que fue dicho, ‘Amarán a su prójimo y odiarán a su enemigo.’ Pero Yo les digo, amen a sus enemigos, bendigan a aquellos que los maldicen, hagan bien a aquellos que los odian, y oren por aquellos que maliciosamente los usan y persiguen” (versos 43-44). Eso es algo muy difícil de hacer. Eso es lo más difícil de hacer en el mundo. Para los fanáticos de los deportes (por ejemplo), es muy difícil aceptar la derrota cuando pierde su equipo. Le gente no se pone contenta sino al contrario— ¿No es así? No está en nuestra naturaleza hacer esto—a menos que tengamos el Espíritu de Dios—y por eso a veces somos puestos en situaciones en las que tenemos la oportunidad de amar a nuestros enemigos.
“…y oren por aquellos que maliciosamente los usan y persiguen. Para que ustedes mismos puedan ser hijos de su Padre que está en el cielo; porque Él hace que Su sol se levante sobre el malo y sobre el bueno, y envía lluvia sobre el justo y sobre el injusto. Porque si aman a aquellos que los aman, ¿Qué recompensa tienen? ¿No practican los colectores de impuestos la misma cosa? Y si ustedes saludan a sus hermanos solamente, ¿Qué han hecho que sea extraordinario? ¿No practican los colectores de impuestos la misma cosa? Por tanto, serán perfectos, incluso como su Padre que está en el cielo es perfecto” (versos 44-48).
¡Esa es toda la meta! Y esto podemos conectarlo con Efesios 4:17, dónde habla sobre la ‘medida de la estatura de la plenitud de Cristo.’ Ahora, voy a hacerles una pregunta y antes de que la respondan, quiero que lo piensen: ¿Cuáles son los mandamientos de amor del Nuevo Testamento, y cuál debería ser el orden de ellos? No es muy difícil; ¡pero se escucha difícil! Acabamos de leer uno de ellos, pero el primero es: ‘amar a Dios con todo el corazón, mente, alma y ser.’ Veamos algo que es fundamental en Mateo 22:37: “Y Jesús le dijo, ‘Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.’ Este es el primero y más grande mandamiento… [Ese es el primero. Sin embargo, el segundo ha sido reposicionado al número tres por las mismas palabras de Jesús]…Y el segundo es como este… [Ahora, si no le gusta que lo posicionemos como número tres, manténgalo como número dos]… ‘Amarás a tu prójimo como a ti mismo’” (versos 37-39). Así que ahora tenemos:
· Amar a los enemigos
· Amar a Dios
· Amar al prójimo
· Amar a los hermanos
...porque Cristo nos dijo que nos amáramos unos a otros de la misma forma en que Él nos amó (Juan 13:33-34; 15:9-12). Esos son los cuatro mandamientos de amor en el Nuevo Testamento.
El verso 40 es clave: “De estos dos mandamientos cuelga… [Significando que están suspendidos desde ellos hacia abajo]...toda la Ley y los Profetas.” Algo clave y fundamental acerca de la ley es que: ¡no puede haber ley sin amor! El amor debe venir primero, para que puedan existir las leyes apropiadas. Y ¿Qué sucede cuando no se tiene el amor apropiado? ¡Las leyes también serán inapropiadas! Luego haremos un estudio para ver que esto fue lo que pasó con los judíos—pero sólo quise repasar estas cosas para que las tuviéramos en mente.
Ahora, cuando sus hijos empezaron a crecer—ya que la mayoría de nosotros tenemos hijos que están creciendo o ya son casi adultos— ¿Por qué puso reglas para ellos? Porque usted los ama, ¿Cierto? Ahora, usted bien podría decir que esa era la ley de la crianza de los hijos, pero ¿Ha usted tramado algo para sus hijos en algún momento (dentro de su mente), que no esté basado en el amor? ¡No! Incluso la corrección (como haya sido) debe haber sido hecha por amor. Ahora, ¿Significa eso que usted no ha cometido errores? ¡No! Al mirar hacia atrás casi siempre vemos las cosas que debimos haber hecho en muchos casos, pero Dios puede vencer todas esas cosas. ¿No hizo usted todo lo que pudo por sus hijos? ¿No hice yo todo lo que pude por mis hijos, porque los amo? ¡Sí! Y es por eso que ¡no puede haber ley sin amor! Es algo muy profundo y fundamental que necesitamos entender.
Volvamos al libro de 1 Pedro 3:14: “Ahora, por otro lado, si ustedes padecen sufrimiento por el bien de la justicia, ustedes son benditos. Pero no deben estar temerosos de su terror… [Usted no debe estar asustado ni sentirse intimidado por este mundo o las personas a que lo rodean. Algunas personas siempre están temerosas o andan paranoicas, pero no deben ser así]… y no deben dejarse intimidar.” Eso es algo clave y muy importante. No está diciendo que sea astuto, sino que no debe ser intimidado. No deje que el mundo lo intimide por lo que usted cree. No se deje intimidar por las circunstancias—especialmente ahora que pueden atraparlo psicológicamente para manipularlo e intimidarlo. Eso es lo que está diciendo: ¡No sea intimidado!
Más bien, haga lo que dice el verso 15: “Pero santifiquen al Señor Dios en sus propios corazones, y siempre estén preparados a dar una respuesta a cualquiera que les pregunte la razón para la esperanza que está en ustedes, con mansedumbre y reverencia.” Por eso es tan importante que el ministro siempre esté enseñando a los hermanos, porque: ¿Cómo va usted a responder, a menos que sepa? ¿Cómo va a poder enseñar el ministro a menos que él también esté creciendo en gracia y en conocimiento? Así es como debe ser. No puede haber un conjunto de doctrinas aprobadas por una mesa doctrinal y que todos estemos de acuerdo con esta doctrina básica, porque—por mucho que esa doctrina sea cierta— ¿Debemos nosotros permanecer estáticos y nunca crecer en gracia, conocimiento, y entendimiento? ¡No! ¡Debemos crecer constantemente en gracia y en conocimiento! ¡Debemos estar listos para dar esa respuesta!
Vayamos a Juan 14:1—que también habla sobre no temer y no ser intimidados. Este es un verso que nosotros podemos añadir a lo que estamos viendo: “No dejen que su corazón esté afligido. Creen en Dios; crean también en Mí.” Así que si usted cree en Jesucristo, no tiene por qué preocuparse; no debe estar temeroso; no debe dejar que lo hagan sentir mal ni que lo traten mal, aunque tampoco tiene porqué atacarlos usted a ellos— porque ese no es el punto.
No hace mucho vi un reportaje en el que un hombre enojado golpeó a otro en la mandíbula. El golpe fue tan fuerte que le soltó la mandíbula—la cual le perforó el cerebro ocasionándole la muerte.
En ese momento pensé, ¡Vaya, hasta dónde puede llegar una sola explosión de enojo! El pobre hombre tuvo que pasar un tiempo en la cárcel. Pero si él no se hubiera permitido el estar temeroso e intimidado, eso no habría sucedido.
Vayamos al Salmo 26:1—de nuevo, hay muchos de estos Salmos que podemos conectar con esto. Como verán, en las epístolas de Pedro también vienen muchísimos Salmos.
Salmo 26:1: “Júzgame, Oh SEÑOR, porque he andado en mi integridad. He confiado también en el SEÑOR sin titubear. Examíname, Oh SEÑOR, y pruébame; prueba mis riñones y mi corazón, Pues Tu bondad amorosa está delante de mis ojos; y he caminado en Tu verdad. No me he sentado con hombres engañosos, ni tampoco entraré con los hipócritas. He odiado la congregación de los malhechores y no me sentaré con los malvados… [Aquí hay uno que tiene que ver con Cristo]… Lavaré mis manos en inocencia; para ir hacia Tu altar, oh SEÑOR.” (Versos 1-6). Si es que podemos tener ese tipo de confianza. Ahora, aunque aquí habla sobre odiar a los malhechores, eso no quita el deber de amar a nuestros enemigos. Usted odia lo que hacen, pero tiene que amarlos.
Ahora, aquí hay otro Salmo tremendo que también ha sido compuesto en una canción magnifica. Probablemente la han escuchado y quizás hasta cantado. Salmo 27:1: “El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿A quién temeré? El SEÑOR es la fortaleza de mi vida; ¿De quién estaré asustado? Cuando el malo, mis enemigos y mis perseguidores, vinieron sobre mí para comer mi carne, ellos tropezaron y cayeron. Aunque un ejército acampe contra mí, mi corazón no estará asustado… [Noten que aquí no hay nada más que fe y confianza en Dios; no hay intimidación]…aunque guerra se levante contra mí, aun entonces estaré confiado. Una cosa he deseado del SEÑOR, que buscaré: que pueda vivir en la casa del SEÑOR todos los días de mi vida, para observar la belleza del SEÑOR y para preguntar en Su templo” (versos 1-4).
Ahora, si usted toma este verso y lo expande a todo el plan de Dios—para estar con Dios—este se convierte en un Salmo tremendo. Después continúa en el verso 5: “Porque en el tiempo del problema Él me esconderá en Su pabellón, en el lugar secreto de Su tabernáculo Él me esconderá; Él me pondrá sobre una roca.” Y como hemos visto anteriormente, esa Roca es Jesucristo.
Verso 14: “Espera al SEÑOR; se de buen coraje, y Él hará fuerte tu corazón; sí, espera, yo digo, espera en el SEÑOR.”
Salmo 28:1: “Clamaré a Ti, Oh SEÑOR; mi Roca, no estés silencioso hacia mí, no sea que, si Tú estás en silencio hacia mí, me vuelva como aquellos quienes descienden a la fosa. Oye la voz de mis súplicas cuando clamo a Ti. Cuando elevo mis manos hacia Tu lugar santo. No me alejes con los malvados, y con los obradores de iniquidad, quienes hablan paz a sus prójimos, pero maldad está en sus corazones” (versos 1-3).
Verso 7: “El SEÑOR es mi fuerza y mi escudo; mi corazón confió en Él y fui ayudado. Por lo tanto mi corazón se regocija grandemente, y con mi cántico le alabaré. El SEÑOR es su fuerza, y Él es la fuerza salvadora de Su ungido. Salva a Tu pueblo y bendice a Tu heredad; sé su pastor y llévalos por siempre” (versos 7-9).
Estos son Salmos que realmente necesitamos porque que nos fortalecen. Todos nosotros (de alguna manera) somos golpeados por este mundo y por las cosas que suceden a nuestro alrededor. Si pueden anoten también Mateo capítulo 10: dónde dice que cuando a usted le toque dar una respuesta, El Padre va a ser Quien hable en usted; El Padre va a ser Quien lo inspire a hablar. Ahora, ¿Cómo puede uno dar una respuesta si no conoce la Palabra de Dios? ¿Cómo puede Dios inspirarlo si usted no tiene Su Palabra en su mente? Esa es la manera en que Dios va a inspirarnos; teniendo Su Palabra en nuestra mente.
Ahora, vayamos a Efesios capítulo tres para ver el propósito y la meta de cómo debe ser nuestro corazón. En cierto sentido—y si podemos hacer una analogía—si nosotros crecemos en Cristo a la medida de Su estatura y plenitud, tenemos algo único: a lo cual yo llamo independencia dependiente. Esto lo digo porque entre más dependemos de Dios, más independiente se vuelve nuestro comportamiento. Sé que esto puede oírse como una contradicción de términos, pero no lo es. Cristo puede reinar más en su mente y en su corazón ¡porque usted está confiando en Él! Su comportamiento se vuelve más independiente porque Cristo esta en usted, y no necesita que alguien venga y le diga lo que tiene que hacer. Esa es toda la meta del cristianismo hermanos.
Efesios 3:16: “Que pueda otorgarles, de acuerdo a las riquezas de Su gloria, el ser fortalecidos con poder por Su Espíritu en el hombre interior; que Cristo pueda morar en sus corazones por fe…” Y esa, hermanos, es la manera en que ustedes pueden dar una respuesta por la esperanza que yace en su corazón—teniendo a Cristo en su corazón—y estando cimentados en el amor. Todo esto encaja de manera tremenda, y así es como podemos ser capaces de responder.
1 Pedro 3:16: “teniendo una buena conciencia, que en lo que pueden hablar contra de ustedes como malhechores, aquellos que están reprochando su buena forma de vida en Cristo, puedan ser avergonzados.”
(Ir a la siguiente pista)
Muy bien,
Ahora continuemos en 1 Pedro 3:17: “Porque es mejor, si esa es la voluntad de Dios…” A algunas personas les gusta golpear espiritualmente a otros en la cara, y después son perseguidos. Hay que dejar en claro que esa no es la voluntad de Dios—sino una retribución de lo que ellos hacen—porque eso no es lo que Dios quiere que hagamos.
Por ejemplo: ¿Qué bien haría traer personas al cristianismo, si usted unilateralmente anduviera por su vecindario destruyendo árboles de navidad? Si usted hiciera eso, estaría golpeándolos espiritualmente por así decirlo. Eso lo haría a usted merecedor de cualquier persecución que pudiera venir en su contra, porque el camino de Dios no es así.
“Porque es mejor, si esa es la voluntad de Dios que ustedes sufran, al hacer el bien… [No tratando de hacer maldad para corregir a alguien, o para tratar de hacerlos buenos]…que sufrir por hacer el mal. Porque Cristo en verdad sufrió una vez por los pecados, el Justo por el injusto, para que Él pudiera traernos a Dios; por un lado, Él fue condenado a muerte en la carne; pero por otro lado, Él fue vivificado por el Espíritu. Por el cual Él también fue y predicó a los espíritus en prisión… [Y la forma en que he traducido esto, lo muestra en su contexto apropiado y en lo que significa en el griego]…Los cuales desobedecieron en un tiempo pasado, cuando una vez la paciencia de Dios estaba esperando en los días de Noé, mientras el arca estaba siendo preparada…” (Versos 17-20). Esto hace referencia a cuando Jesús, como ser espiritual—el Señor Dios del Antiguo Testamento—fue y predicó a los espíritus en prisión. También hay otras Escrituras que podemos adjuntar aquí.
Pongamos ahí 2 Pedro 2:4, que dice: “Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron… [Y aquí es donde las Escrituras básicas nos ayudan mucho, porque ¿Qué es el pecado? El pecado es la transgresión de la ley. Cuando ellos pecaron, fueron en contra de las leyes de Dios]…sino, habiéndolos echado en el Tártaro [o el infierno, porque en El griego aquí ‘tártaro’ es un lugar de restricción]…los entregó a cadenas de oscuridad para ser guardados para el juicio.” Cuando ellos pecaron, Él los echó abajo. Y ¿Por qué los echó abajo? ¿Cuál fue su pecado?
Judas 6—también se conecta con eso: “Y los ángeles que no guardaron su propio dominio original, sino desertaron su habitación, Él está reteniéndolos en cadenas eternas bajo oscuridad hasta el juicio del gran día.” Los ángeles no quisieron hacer la voluntad de Dios, y no estuvieron dispuestos a aceptar lo que Dios tenía para ellos. Entonces, esto también lo podemos conectar con Apocalipsis 12, cuando un tercio de los ángeles se rebeló y se fueron con Satanás el diablo. Nosotros podríamos preguntarnos ‘¿Cómo paso eso?’, pero es probable que haya sido de la misma manera en que sucede dentro de la Iglesia. Las personas inician una jerarquía, y la jerarquía dice confía en mi—en lugar de confiar en Dios. Así que Satanás probablemente se puso a sí mismo entre Dios y los otros ángeles, y les dijo, ‘Ahora yo hablaré con Dios, y ustedes hablen conmigo para decirles lo que Dios dice.’ Después vino la rebelión.
Apocalipsis 12:4: “Y su cola barrió un tercio de las estrellas del cielo, y las echó a la tierra…” Este es aquel ‘gran dragón rojo,’ descrito en el verso 9 como Satanás el diablo. Todos conocemos las Escrituras básicas de Isaías 14 y Ezequiel 28—pero no vamos a ir ahí. Ahora, cuando el arca estaba siendo construida, Dios les dio un testimonio personalmente. Jesucristo, Quien en ese tiempo era el Señor Dios del Antiguo Testamento, era un ser espiritual. Él fue a este ‘lugar de restricción’ –al cual sólo podía llegar siendo espiritual— aunque no sé dónde esté ese lugar exactamente. La verdad es que ni siquiera me interesa saber dónde está, pero algunos dicen que es el abismo sin fondo—lo cual es una posibilidad.
Así que Él fue cuando el arca estaba siendo construida, y aquí hay una descripción de la condición en la que estaba el mundo. Así es como Jesús dijo que el mundo va a estar antes de que Él vuelva: Génesis 6:5: “Y el SEÑOR vio que la iniquidad del hombre era grande sobre la tierra, y cada imaginación de los pensamientos de su corazón era solo el mal continuamente.” Esa es una situación muy complicada.
El 12 de abril recibí un artículo de Time Magazine—que habla sobre innovaciones tecnológicas que están por salir. Y ¡Va a suceder! Usted podrá tener 500 canales de televisión en su casa. ¡Piénsenlo! Si su mente ya se vuelve loca con 12, 14 o 20 canales, como será con 500 transmitidos por medio una fibra óptica (que es como un cable de vidrio). Sé que suena contradictorio, pero es cierto. También van a tener libros, revistas, artículos—muchas otras cosas. Va a llegar el momento en que usted pueda sentarse en su casa sin tener que moverse para hacer nada. Podrá pedir lo que sea con tan solo digitarlo en sus dispositivos—y hasta las computadoras le va a responder. ¡Imagínense! Si está muy aburrido va a poder sentarse y decirle a su computadora: ‘Computadora, habla conmigo.’ Sí, de qué quieres hablar.
Traten de combinar esto con lo que ya tenemos, y piensen en todo el mal que puede venir por esto. Si usted piensa que ahora hay maldad en los canales que tenemos, ¡piensen como va a ser con 500! Ahora, por otra parte, esto también puede traer una opción más para predicar más el Evangelio, ¿Cierto? ¡Sí, efectivamente! Así que la gente va a tener la oportunidad de escuchar el Evangelio, o de mirar pornografía en vivo por la televisión. Es posible que hasta puedan llegar a haber programas sobre demonismo y cosas así.
Dios va a hacer las cosas de tal forma, que los seres humanos no van a poder decir: ‘Dios ¿Por qué viniste a destruir la tierra? ¿Por qué enviaste a Cristo de vuelta?’ Yo pienso que Dios va a dejar que todos lleguen a un punto en este mundo—en su rebelión contra Dios, en su maldad, y en la imaginación de sus pensamientos—en el que todos se sientan tan importantes que hasta lleguen a pensar que son dioses. Bueno, tal vez estoy exagerando un poco, pero ¡puedo verlo sucediendo!
¿No son los niños malcriados hoy en día? ¡Sí, lo son! El otro día entré a Burger King a comprarme una hamburguesa—porque aún me gustan las hamburguesas—y había un niño pequeño con su padre. El niño estaba muy malcriado, y yo pensé: ¿Qué se le puede enseñar a un niño como ese? ¿Qué va a aprender un niño así? Me puse a pensar que si él fuera mi hijo, le diría que se quedara quieto. Pero como no era mi hijo, no me atreví a hacerlo por evitarme problemas.
Otra de las cosas que pensé en ese momento fue: ¿Con qué va a estar satisfecha esta generación? ¡Sólo buscan ser saciados con todo lo que es posible hacerle a la mente y al cuerpo! Tal vez estoy exagerando un poco, pero déjenme decirles que cuando ellos estén dispuestos a pelear contra Cristo a Su regreso, va a ser algo fantástico. Por lo tanto hermanos, pueden estar seguros de que no va a haber una reformación de este mundo—sino que está destinado a ser destruido. Entonces, cuando Jesús fue ahí, dijo: ‘Miren lo que han hecho con el mundo. Todos son malvados. Todos excepto Noé.’ Es posible que le haya dicho cuál iba a ser la situación de ellos.
Ahora, volvamos a 1 Pedro 3:20, donde dice: “…mientras el arca estaba siendo preparada… [Cuando Él fue ahí]…en la cual unos pocos—esto es, ocho almas—fueron salvados a través del agua; De lo cual un cumplimiento similar es el bautismo…’ (Versos 20-21). Y ahí pueden anotar Romanos 6 donde se habla sobre el bautismo, y de que así como somos ‘co-unidos en Su muerte, también debemos ser co-unidos en una novedad de vida.’
“…De lo cual un cumplimiento similar es el bautismo, y ahora está salvándonos—no la eliminación de la suciedad… [Que en la Reina Valera la palabra ‘suciedad’ hace referencia a la suciedad de la tierra. Pero después de repasar, de estudiar, y de entender lo que esa palabra significa en realidad, no es el remover la suciedad de la tierra como en una ducha, sino que es]…la eliminación de la suciedad… [Refiriéndose a la circuncisión. ¿Por qué? Porque dice que es]…una apelación a Dios para una buena conciencia… [Que es la circuncisión del corazón]… a través de la resurrección de Jesucristo” (verso 21).
Debido a que hemos cubierto esto en sermones recientes, sólo mencionaré esto para fines de estudio y para las notas. ¿Dónde es que debemos ser circuncidados? ¡En nuestros corazones! Deuteronomio 10:16 dice: “circunciden el prepucio de su corazón.” Romanos 2:28-29 habla sobre ‘la circuncisión del corazón’—no de la carne. Colosenses 2:11 menciona: ‘la circuncisión de Cristo no hecha con manos.’ Eso es lo que debemos hacer, y Pedro lo refrenda aquí en la última parte de 1 Pedro 3:21: “…sino una apelación a Dios para una buena conciencia a través de la resurrección de Jesucristo.”
Ahora ¿Por qué es esto tan importante? ¿Por qué lo enfoca en la resurrección de Cristo? ¡Porque Cristo tenía que levantarse y ascender al cielo para ser nuestro Sumo Sacerdote a la mano derecha de Dios! Hace como seis o siete años empecé la serie en 1 Corintios. Pero como ninguno de esos problemas se aplicaba a la iglesia (o a esta congregación), lo suspendí cuando íbamos como en el capítulo ocho. Bueno, lo que vamos a hacer es descubrir y a entender porqué ocurrían todas esas herejías. Carl Franklin está haciendo algo de investigación por nosotros; pero como hemos mencionado anteriormente, ellos tenían el problema de los Fariseos, el problema de los Saduceos, el problema de los sacerdotes, el problema de la circuncisión… y todas esas herejías se veían reflejadas en estas cosas. Si usted era un saduceo y no creía en la resurrección, entonces se iba al cielo— ¿Cierto? ¡Pues no, nunca!
Algunas ocasiones me llegué a preguntar: ¿Cómo era posible que la Iglesia tuviera personas predicando que ‘los muertos no se levantan’, cuando todo acerca de Cristo se basa en Su resurrección? — ¿Cierto? Nunca pude descifrar eso, pero creo que ahora podemos entender lo que estaba sucediendo.
1 Corintios 15:12: “Pero si Cristo está siendo predicado, que Él se levantó de los muertos, ¿Cómo es que algunos entre ustedes…? [Predicando en esa congregación]… ¿están diciendo que no hay resurrección de los muertos? Porque si no hay resurrección de los muertos, tampoco Cristo ha sido levantado. Y si Cristo no ha sido levantado, entonces nuestra predicación es en vano, y su fe es también en vano” (versos 12-14). Y es por eso que Pedro menciona en 1 Pedro 3—que Cristo tuvo que ascender a la mano derecha del Padre para el perdón de nuestros pecados, y también para la vida eterna.
Verso 15: “Y nosotros somos encontrados también ser falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que Él levantó a Cristo, a Quien Él no levantó, si ciertamente los muertos no son levantados. Porque si los muertos no son levantados, tampoco Cristo ha sido levantado. Pero si Cristo no ha sido levantado, su fe es vana; ustedes están todavía en sus pecados” (versos 15-17).
Así que esto es de lo que Pedro está hablando. Y la única manera de poder tener una buena consciencia es a través la resurrección de Cristo. 1 Pedro 3:22: “Quien ha ido al cielo y está a la mano derecha de Dios, ángeles y autoridades y poderes, habiendo sido puestos en sujeción a Él.”
Volvamos a leer desde el verso 21: “…sino una petición a Dios de una buena conciencia por la resurrección de Jesucristo. Quien ha ido al cielo, y está a la mano derecha de Dios, ángeles y autoridades y poderes, habiendo sido puestos en sujeción a Él” (versos 21-22).
Ahora hermanos, vamos a ver que el hecho de que Cristo esté a la mano derecha de Dios, es algo tremendo para nosotros. Necesitamos entender más profundamente lo mucho que Dios está de nuestro lado (a pesar de las circunstancias a nuestro alrededor), y lo mucho que significa para nosotros el llamamiento de Dios. Así que volvamos a Isaías 48 y veamos lo que significa estar “a la mano derecha de Dios.” Esto es algo muy importante que tiene que ver con nosotros, y con lo que Dios está haciendo en nuestras vidas.
Isaías 48:12: “Óiganme, Oh Jacob e Israel, Mi llamado…” Esa es una frase interesante, ¿No es así? Si sabemos que el nombre de Jacob fue cambiado a Israel, ¿Por qué usaría ambos en esta pregunta? Esto es sólo un pensamiento, pero: Quizás al decir ‘Oh Jacob’ se esté refiriendo a las 12 tribus de Israel, y al decir ‘Israel’ se esté refiriéndose a la Iglesia, la nueva Israel. Ahora, esta no es una declaración dogmática sino sólo algo que podría ser—porque es interesante que mencione a ambos en esta oración: “Oh Jacob e Israel, Mi llamado…” Y lo que ustedes pueden hacer, es repasar:
· El llamamiento de Dios
· Que nadie puede venir a Cristo a menos que el Padre lo traiga
· Que nosotros debemos ser llamados
· Que nosotros somos escogidos
· Que nosotros somos seleccionados
Estas cosas nos muestran lo grandioso que es el plan de Dios, al ser escogidos particularmente por Él. Dios dice; “…Yo soy Él… [O Yo soy el Único—el Único Quien es Dios]…Yo soy el primero, Yo también soy el ultimo.” Y esto también podemos conectarlo con algunas otras cosas.
Vayamos a Apocalipsis capítulo uno, donde veremos que esto es lo que identifica a Jesucristo. Esto nos revela que Aquel Quien era el Señor Dios del Antiguo Testamento, fue Aquel Quien se convirtió en Jesucristo. Apocalipsis 1:5 dice: “de Jesucristo, el Testigo fiel…” ‘Testigo’ es una palabra muy interesante porque en el griego es ‘martus,’ que también puede significar mártir. Así que Jesucristo no sólo es un testigo sino también un mártir. Estos dos pueden aplicar a Él perfectamente, porque: Él fue fiel, Él fue un testigo, y también fue un mártir.
“…el Primogénito…” [El griego para esta palabra no es ‘monogenes’ que sería engendrado, sino que es ‘prototokos’ que es primogénito]…de los muertos… [Y todo lo que hacemos está enfocado en el hecho de que Jesucristo se levantó de los muertos]…y el Gobernador de los reyes de la tierra. A Él Quien nos amó…” (verso 5). Necesitamos entender lo mucho que nos amó Jesucristo, entendiendo que Él voluntariamente sufrió y soportó la muerte en la cruz, ‘por el gozo que estaba puesto delante de Él.’
“…y lavó de nuestros pecados en Su propia sangre… [Usted sabe y entiende que ningún otro sacrificio puede hacer lo que hace el sacrificio de Jesucristo. Así que tenía que ser con Su propia sangre]…Y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios y Su Padre…” (Versos 5-6). Y aunque esa es la promesa de nuestro futuro, Él lo dice como si ya estuviera hecho porque Él mira las ‘cosas que no son como si lo fueran; y las cosas que serán como si ya hubieran ocurrido.’
Si usted es fiel y ama a Dios, y si usted le responde—es casi como si ya estuviera hecho. Ahora, eso no significa que nos vayamos al extremo de decir: ‘Bueno, ahora voy a practicar ser un rey y sacerdote, y me voy a convertir en un tirano, en un ser egocéntrico, y voy a tomar todo para mí mismo y a enseñorearme sobre todos.’ No significa eso en lo absoluto hermanos. Y ¿Saben por qué? Porque nadie va a ser un rey o un sacerdote con Jesucristo a menos que aprenda la humildad. ¡Dios es el ser más humilde del universo! Y debemos mantener nuestra perspectiva en eso.
Verso 6: “…a Él sea la gloria y la soberanía en las eras de eternidad. Amen.” Esta frase también es interesante en el griego, porque van a venir eras de la eternidad. Habrán eras en las que estaremos haciendo cosas como los hijos mismos de Dios, y la primera era que vamos a vivir será La Era del Milenio. Después vendrá la era de la resurrección de los injustos y de los malvados incorregibles—para después dar inicio a una nueva era en la eternidad con la venida de la Nueva Jerusalén. Así que dondequiera que usted vea un ‘por siempre y para siempre’ recuerde que también puede traducirlo como ‘las eras de la eternidad.’
Verso 7: “He aquí, Él viene con las nubes, y todo ojo lo verá…” Y en base a esto podemos preguntarnos: ¿Cómo es que algunos han predicado que va a haber una mano ‘no vista,’ que de la nada va a salvar al mundo? La realidad es que si uno no predica a Jesucristo, entonces predica otro Evangelio. Y si usted predica una ‘mano no vista’ –está predicando otro Evangelio porque todo ojo lo verá.’
“…y aquellos que Lo traspasaron… [Esto incluye a todo ser humano sobre la tierra, porque fueron nuestros pecados los que lo mataron]…y todas las tribus de la tierra gemirán por causa de Él. Aun así, Amén” (verso 7). Ahora, es importante señalar que la expresión ‘aun así, Amen,’ es una afirmación dogmática que en idioma moderno puede traducirse como, ¡Puede contar con ello!
Ahora noten como Isaías 48 se conecta con el verso 8: “ Yo soy el Alfa y el Omega, el Principio y el Fin,’ dice el Señor… [Así que Él no sólo era Aquel Quien es—como dice en Isaías 48, ‘Yo Soy el Único’—sino que ahora Jesús ha expandido ese título aún más, por Su primera venida]… ‘Quien es… [Existiendo en la actualidad]…y Quien era… [Jesucristo en la carne y el Señor Dios del Antiguo Testamento]…y Quien está por venir… [El Cristo que volverá en gloria y poder] …—el Todopoderoso.’”
Lo bello de estudiar la Biblia es: Que si usted realmente la estudia y ve por lo que ésta enseña—siendo que ‘las Escrituras no son de interpretación privada’ como dijo Pedro, sino que se interpreten a sí mismas—verá que la Biblia no se contradice a sí misma. Está estructurada de una manera tan fantástica y maravillosa, para que podamos crecer espiritualmente en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo; y entendamos lo que Dios tiene para nosotros.
Ahora volvamos a Isaías 48 para ver qué es ‘la mano derecha de Dios.’ Esto debería darnos una idea del poder y de la autoridad de Dios y de Su Palabra; de lo que Él va a hacer.
Isaías 48:12: “…Yo soy el primero, Yo también soy el último. Mi mano también ha colocado el fundamento de la tierra… [Y aunque esto ya lo sepamos hasta de memoria, anoten en su margen Juan 1:1-3]…y Mi mano derecha ha extendido los cielos…” (Versos 12-13). Imaginen a Cristo parado en el universo diciendo: ‘Que hayan estrellas,’ y que con sólo el extender de Su mano sean creadas en la plenitud del universo—con el poder de Su Espíritu saliendo de Su boca y de Su mano. Esta es la razón por la cual Pedro dice que Él está a la mano derecha de Dios, lo cual es algo muy poderoso para nosotros. Es muy importante que entendamos esto en relación a:
· Lo que Dios está haciendo por nosotros
· Lo que Dios está haciendo a través de nosotros
· Lo que Dios está haciendo en nosotros
· Ser capaces de venir ante Dios en oración
· Ser capaces de venir ante Dios y entender Su Palabra
Recuerden lo que Jesús les dijo a Sus discípulos antes de dejarlos. Vayamos a Mateo 28, y veamos las últimas amonestaciones que Mateo registró acerca de Jesucristo.
Esto es algo muy profundo porque nos hace preguntarnos: cómo es que podemos llegar a una condición espiritual tan débil— o a una condición de pereza o de letargo. ‘Sé que debo orar’—pero no lo hago, o ‘Desearía que Dios me bendiga, pero no lo hace.’ Parte de eso tiene que ver con nuestra fe, con nuestra reacción, y con nuestra respuesta a Dios. Porque si nosotros tenemos en mente lo que estamos viendo ahora… entonces no iremos ante Dios con esas actitudes, debilidades, ni con ese carácter humano quejumbroso.
Mateo 28:18: “Y Jesús vino y les habló… [Esto es, a los discípulos—porque aún había algunos que dudaban (verso 17)]…diciendo, ‘Toda autoridad… [La autoridad sobre todo lo que hay, y que Dios el Padre le ha dado a Jesucristo]…en el cielo y sobre la tierra Me ha sido dada.”
· ¿Carecemos nosotros de algo?
· ¿Tenemos a alguien que no puede contestar nuestras oraciones?
· ¿Tenemos a alguien que no nos conoce?
¡No! Tenemos a Alguien Quien tiene el poder, y Quien puede contestar nuestras oraciones. Es por eso que Pedro dijo que ‘Él [Cristo] está a la mano derecha de Dios,’ y que ‘ángeles y autoridades y poderes han sido puestos en sujeción a Él.’
Ahora volvamos nuevamente a Isaías 48:13: “Mi mano también ha colocado el fundamento de la tierra, y Mi mano derecha ha extendido los cielos. Cuando Yo llame ellos se pararán juntamente.” En un momento más iremos a Hebreos capítulo 1, para ver un poco más sobre el poder de Jesucristo.
Primero vayamos al Salmo 110—porque ahí está una de las cosas más poderosas que fue predicada por los apóstoles. Esto es lo que enloquecía a los líderes religiosos, al sacerdote, a los fariseos y a los escribas. Cada vez que escuchaban esto rechinaban los dientes—y este es un verso muy profundo que Pedro predicaba todo el tiempo.
Salmo 110:1: “El SEÑOR [Yahveh] dijo a mi Señor…” Adoni. Esta es una de las dos o tres referencias en el Antiguo Testamento, que revelan un poquito acerca de Dios el Padre. El Antiguo Testamento no revela a Dios el Padre, y ellos no lo conocieron hasta que Cristo vino a revelarlo. Sin embargo, hay un lugar que nos da una pista un poco más contundente… de que hay más de una persona en la familia Dios.
“…‘Siéntate a Mi mano derecha…” La mano derecha es simbólica de poder, de autoridad, de trabajo, y de creación. Ahora, esto no es discriminación contra los zurdos. Lo que estamos diciendo es que la mano derecha es simbólica de todo este poder. “…Siéntate a Mi mano derecha hasta que Yo ponga a Tus enemigos como Tu taburete.’”
Ahora, esto se conecta directamente con 1 Corintios 15—vayamos ahí para ver cómo el Apóstol Pablo predicó exactamente lo mismo. Cuando usted entiende la Biblia y la conecta de la manera apropiada, se da cuenta de que Pablo, Pedro, Santiago, Juan, Lucas, Marcos y Mateo predicaron el mismo evangelio. Tal vez hayan usado distintas palabras, pero todos ellos predicaron el mismo evangelio sin duda alguna.
1 Corintios 15:20: “Pero ahora Cristo ha sido levantado de los muertos; Él ha llegado a ser el primer fruto de aquellos que han dormido. Porque ya que por un hombre vino la muerte, por un hombre también vino la resurrección de los muertos. Porque como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos serán hechos vivos. Pero cada uno en su propio orden: Cristo el primer fruto… [Simbolizado por la ofrenda de la gavilla mecida]…luego, aquellos que son de Cristo a Su venida” (versos 20-23). Entonces, esto nos muestra muy claramente que:
· Nadie ha ido al cielo
· Nadie ha sido resucitado a inmortalidad
· Nadie será resucitado hasta que Cristo regrese
Verso 24: “Después que el fin llegue, cuando Él habrá entregado el reino a Él Quien es Dios y Padre, cuando Él habrá puesto un fin a todo gobierno y toda autoridad y poder. Porque está ordenado que Él reine hasta que Él haya puesto a todos los enemigos bajo Sus pies. El último enemigo a ser destruido es la muerte. Porque Él ha puesto todas las cosas en sujeción bajo Sus pies. Pero cuando es dicho que todas las cosas han sido puestas en sujeción, es claramente evidente que no lo incluye a Él Quien puso todas las cosas en sujeción bajo Él. Pero cuando Él haya puesto todas las cosas en sujeción a Él, entonces el Hijo Mismo estará también sujeto a Él Quien puso todas las cosas en sujeción a Él… [Jesús dijo, ‘Mi Padre es más grande que Yo’]… de modo que Dios puede ser todo en todos” (versos 24-28). Y ese ‘todo’ hermanos, tiene que ver con el poder de Cristo a la mano derecha de Dios.
Volvamos a Daniel capítulo 7 para ver otra referencia sobre Jesucristo. De hecho, esta es la única otra referencia en el Antiguo Testamento que hace alusión a Dios el Padre. Después veremos cómo Cristo usó esto para referirse a Sí mismo, y cómo los escribas y fariseos realmente entendieron a Jesús cuando les habló sobre esto. Veámoslo cuidadosamente porque: El haber citado y aplicado esto hacia Él mismo, fue una de las razones principales por las cuales los sacerdotes y los saduceos dijeron ‘Está blasfemando; es digno de muerte.’ Así que ellos entendían esta Escritura, pero no entendían que se aplicaba a Cristo.
Daniel 7:13: “Vi en visiones en la noche y, he aquí, Uno como Hijo de hombre venía con las nubes del cielo, y vino al Anciano de Días…” La expresión ‘Hijo de hombre’ se refiere a Jesucristo—porque en los registros de los evangelios vemos que en varias ocasiones Él se refirió a Sí mismo como ‘el Hijo de hombre’. Ahora, la expresión ‘El Anciano de Días’ hace referencia a Dios el Padre—aunque Dios el Padre no había sido revelado en ningún otro lado más que en el Salmo 110:1, y en Daniel 7:13 (que es donde estamos ahora). Ellos no sabían acerca de Dios el Padre; ellos sólo sabían acerca de Yahveh o Elohim o El Shaddai, o de alguno de los otros nombres que Dios usó en el Antiguo Pacto.
“…y ellos lo acercaron delante de Él. Y dominio y gloria le fue dado, y un reino…” (Versos 13-14). Ahora, esto será cuando Cristo reciba el Reino. Y ¿Cuándo será el cumplimiento de esto? ¡Cuando Cristo regrese! ¿Cómo lo hará? ¡En las nubes! Es por eso que dice, ‘con las nubes del cielo.’ ¿Cuándo recibirá Él estos reinos? ¡En la última trompeta! (Apocalipsis 11).
Y será “…que toda la gente, naciones e idiomas deberían servirle. Su dominio es un dominio eterno el cual no pasará, y Su reino uno el cual no será destruido” (verso 14).
Hermanos, ¡nuestro llamamiento es absolutamente fantástico! Más adelante—cuando comencemos a adentramos en otras cosas—les probaré que la religión no es de Dios. La ‘religión’ es de personas que quieren mostrar su propia bondad. El camino de Dios y el llamamiento de Dios son un camino de vida. Dios nos ha dado la esperanza más grande, las metas más grandes, y ¡el llamamiento más grande que puede haber! Necesitamos mantener eso en mente.
Vayamos a Lucas 22:66: “Entonces tan pronto como fue de día, los ancianos del pueblo se reunieron juntamente, con ambos los sacerdotes jefes y los escribas, y ellos Lo llevaron a su Sanedrín… [Por decirlo de forma abreviada]…diciendo, ‘Si eres el Cristo, dinos.’ Y Él les dijo, ‘Si les dijera, ustedes no Me creerían en absoluto; Y si también Yo les preguntara, ustedes no Me responderían en absoluto, ni Me dejarían ir. En lo sucesivo estará el Hijo de hombre sentado a la mano derecha del poder de Dios.’… [¡¿No es sorprendente?!]…Y todos ellos dijeron, ‘¿Entonces eres Tú el Hijo de Dios?’ Y Él les dijo, ‘Yo soy aquel, como ustedes dicen’” (versos 66-70). En otras palabras, si pudiéramos reformular esto un poquito: ‘Ustedes acaban de decir que Yo soy.’
Noten su reacción, verso 71: “Entonces ellos dijeron, ‘¿Qué necesidad tenemos de cualquier otro testigo? Porque nosotros mismos hemos oído de Su propia boca.’” En otro de los registros dice que el sumo sacerdote rasgó sus vestiduras, aunque muchas personas no entienden lo significativo que era ese acto.
Referencias Bíblicas:
· 1 Pedro 3:12
· Eclesiastés 8:11
· 1 Pedro 3:13-18
· Salmo 56:1-13
· Mateo 10:28-30
· Isaías 50:7-11
· Isaías 51:1-3
· 1 Pedro 3:14
· Mateo 5:10-12, 43-48
· Mateo 22:37-40
· 1 Pedro 3:14-15
· Juan 14:1
· Salmo 26:1-6
· Salmo 27:1-5, 14
· Salmo 28:1-3, 7-9
· Efesios 3:16
· 1 Pedro 1:16-20
· 2 Pedro 2:4
· Judas 6
· Apocalipsis 12:4
· Génesis 6:5
· 1 Pedro 3:20-21
· 1 Corintios 15:12-17
· 1 Pedro 3:22, 21-22
· Isaías 48:12
· Apocalipsis 1:5-8
· Isaías 48:12-13
· Mateo 28:18
· Isaías 48:13
· Salmo 110:1
· 1 Corintios 15:20-28
· Daniel 7:13-14
· Lucas 22:66-71
Escrituras mencionadas, no citadas:
· Hebreos 5
· Juan 6:63
· Romanos 8
· Efesios 4:17
· Juan 13:33-34; 15:9-12
· Juan 15:9-12
· Apocalipsis 12:9
· Isaías 14
· Ezequiel 28
· Romanos 6
· Deuteronomio 10:16
· Romanos 2:28-29
· Colosenses 2:11
· Juan 1:1-3
· Mateo 18:17
· Apocalipsis 11
También citados: Libro:
La Pascua Cristiana por Fred R. Coulter